Entre aplausos, fuegos pirotécnicos y gritos de “¡Viva Oaxaca! ¡Viva la Guelaguetza!, se llevó acabo la emisión vespertina de los lunes del Cerro, en donde participaron 14 delegaciones representativas de las regiones de Valles Centrales, Costa, Istmo, Cañada, Mixteca y Papaloapan.
Previo al inicio de la segunda presentación del Lunes del Cerro, se apreciaron largas filas de turistas nacionales e internacionales, así como oaxaqueñas y oaxaqueños que se formaron para ingresar a la rotonda de las azucenas y disfrutar del 90 aniversario de la fiesta más grande de América Latina. Con bebidas tradicionales en mano como el tejate, las y los asistentes esperaron pacientemente a que se abrieran los accesos para la segunda presentación, y disfrutar de la música, bailes y gueza que las delegaciones presentan a Oaxaca y al mundo.Con un cielo despejado en la capital oaxaqueña, en punto de las 17:00 horas más de 12 mil asistentes cantaron junto con Miroslava Ferra -cantautora istmeña- el himno de las y los oaxaqueños “Dios nunca muere”, de Macedonio Alcalá. Posteriormente, el Viejo Tiliche, danzante emblemático de Putla Villa de Guerrero anunció el inicio de la segunda emisión de la Guelaguetza.
Asimismo, la representante de la diosa Centéotl, Jacsenic Maybeth Rodas González, originaria de Santo Domingo Tehuantepec, dio la bienvenida a las y los asistentes que ansiosamente esperaban el inicio de la fiesta racial más importante de Latinoamérica.
En el marco de la emisión vespertina de la “Guelaguetza 2022”, el gobernador del Estado, Alejandro Murat Hinojosa acompañado por la presidenta honoraria del Sistema DIF Oaxaca, Ivette Morán de Murat, señaló que Oaxaca está de fiesta. “Oaxaca hoy comparte la celebración a la vida. Me da mucho gusto que después de dos años podamos estar aquí todas y todos reunidos para dar un mensaje a México y al mundo, que Oaxaca tiene mucho que ofrecer”.
Ante el representante del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en México, Ernesto Hugo Stein; el embajador de Holanda, Wilfred Mohr y el embajador de Canadá en México, Graeme C. Clark, quien asistieron a este homenaje racial, el Mandatario Estatal reconoció el esfuerzo de las oaxaqueñas y oaxaqueños para salir adelante después de dos años de pandemia y recibir cálidamente a las y los turistas a las festividades de “Julio, mes de la Guelaguetza”.
“En Oaxaca se vive en paz y alegría, y eso es producto del esfuerzo de todas las oaxaqueñas y oaxaqueños. Oaxaca hoy está de moda, lo mejor que tenemos es nuestra cultura, tradiciones y nuestra historia”, enfatizó ante medios de comunicación.
La fiesta arrancó con la presentación del fandango de cajón en la mayordomía de San Andrés Huaxpaltepec, de la región de la Costa oaxaqueña, en la que 34 danzantes y músicos que integran la delegación mostraron al mundo su música, textiles, danza y cultura. Le siguieron, los Sones Mazatecos de Huautla de Jiménez, de la región de la Cañada, nuevamente representando la “Lavada de cabeza de los novios”, ritual tradicional de esta población cuya creencia es que los novios antes de contraer matrimonio deben estar puros de cuerpo y alma.
San Antonino Castillo Velasco, de los Valles Centrales, continuaron con la representación del “Segundo día de fandango y el Jarabe del Valle”, mientras los espectadores disfrutaban un rico y caliente atole de leche. Posteriormente, el escenario se llenó de colores y retumbó al presentarse la Danza de la Pluma por Cuilápam de Guerrero, con su baile que enmarca el mestizaje cultural que se dio tras la llegada de los españoles.
La región del Istmo, Salina Cruz mostró la belleza de su traje regional que portan orgullosamente mujeres y hombres, en esta ocasión simbolizaron la Fiesta patronal a San Francisco de Asís, festividad que se celebra el 4 de octubre. El auditorio de la Guelaguetza también vibró con la presencia de la Danza de los Diablos de San Sebastián Tecomaxtlahuaca, de la región Mixteca, cuyos integrantes y artesanos de la población mostraron al mundo su talento con su baile y máscaras talladas en madera.
La algarabía de la delegación de Huajuapan de León, de la región Mixteca, desbordó la alegría de las y los visitantes, al cantar al unísono la canción mixteca de José López Alavés al tiempo de ondear los sombreros, y presenciar el inigualable “Jarabe mixteco”, que por segunda ocasión se presenta en este primer Lunes del Cerro. Santa María Zacatepec, ubicado en el distrito de Putla de Guerrero también estuvo presente con su tradicional indumentaria al interpretar su Fandango y Carnaval Tacuate.
¡Ya llegaron los de Ejutla! fue el grito de los participantes de la delegación de la Heroica Ciudad de Ejutla de Crespo y su “Jarabe ejuteco”, quienes además enaltecieron la grandeza de los pueblos de Oaxaca con sus coloridas faltas y versos alegres que arrancaron risas de los presentes. También de los Valles Centrales, Ocotlán de Morelos representó “La llevada de guajolote”, tradición que se realiza dos días antes de la de una boda y que consiste en llevar obsequios de parte de la familia del novio a la familia de la novia, como mole, dos guajolotes, pan, chocolate y flores.
Desde el Papaloapan, la delegación de San Juan Bautista Tuxtepec presentó “Flor de piña”. La belleza de sus mujeres y el colorido de sus textiles, así como su coreografía cautivaron a los miles de asistentes que se dieron cita en el auditorio del Cerro del Fortín. La región del Istmo nuevamente se hizo presente con San Blas Atempa y su fiesta titular, que tiene una profunda relación indígena, ya que se celebra según el calendario agrícola.
La Costa oaxaqueña, con los sones, juegos y chilenas de Santiago Pinotepa Nacional alegró aún más los corazones de las y los visitantes, con sus versos pícaros y ritmos alegres de su zapateado que caracteriza a esta región. Finalmente, fueron la Chinas oaxaqueñas de Casilda Flores quienes cerraron con broche de oro la emisión vespertina de la Guelaguetza 2022 con su tradicional “Jarabe del Valle” acompañado la tradicional chirimía que anuncia el comienzo de la fiesta, seguidas de las marmotas y las Chinas con sus espectaculares canastas adornadas con flor inmortal.
Al ritmo de los acordes de la Banda de Música del Estado, y un escenario que desbordó alegría y baile, así como juegos pirotécnicos que iluminaron el escenario y el cielo del Cerro del Fortín, concluyó con tranquilidad y orden el primer Lunes del Cerro, en su 90 aniversario.